
RECOLECTORA DE CONCHAS
Desde niña me gusta pasear por la playa y recoger conchas. Las guardo en botes y cajas y a veces llego a tener tantas que tengo que regalarlas. Hay algo de mágico en las conchas. Son la casa de seres pequeños, protección y hogar, y son tan bonitas y diferentes que me paso horas mirándolas.
De vez en cuando las incorporo en las joyas que diseño y se convierten en pequeños detalles muy especiales. Incluso puede haber una pieza entera de conchas.
En mi colección particular de piezas de mis viajes tengo algún collar solo de conchas. Un día de estos os los mostraré. Son verdaderos tesoros.
Quizá desde ahora cuando estés en la playa y guardes conchas puedes hacerte un collar. Ya verás qué bonita sensación. Te hará recordar el mar seguro.
Un abrazo
Virginia




